¡Síguenos!Fueron más de 400 alumnos de diferentes carreras que mostraron sus dudas y preguntaron sobre el libro y la situación actual de las mujeres en México. La escritora Argentina que ha vivido por más de cuarenta años en México y conoce las problemáticas sociales que le aquejan al país.
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La estirpe del Silencio (Seix Barral), su novela más reciente narra la historia de aquellas mujeres que enfrentan experiencias degradantes en México, y que base a su sufrimiento son obligadas a la prostitución y abuso sexual. Tema que se ha desatado durante el siglo XX no sólo en diferentes partes de la República Mexicana si no en distintos estados como lo es Ciudad Juárez y hoy caso sonado Puebla.
Laura Flores y Tenorio coordinadora del Programa Pasión por la Lectura del Tecnológico de Monterrey en Puebla, dio la bienvenida a la también especialista en arte y literatura latinoamericanos, poeta, narradora y ensayista.
“Me alegra no sólo que hayan podido leer la novela si no adentrarse con cada uno de los personajes y conocer el trasfondo de lo que consiste la historia, en una problemática actual en la que se necesita reflexionar sobre la necesidad de justicia en el país”, explicó Lorenzano.
Así mismo, comento que la población se encuentra parada en un lugar en donde el aparato de justicia no funciona o sólo para algunas personas. Como hacer justicia, y no ser inmorales como los asesinos, sino buscar construir una ética y moralidad distinta, derivando barreras como los prejuicios, la intolerancia, la falta de respeto, la desconsideración, el no mirar, el no escuchar.
La novela tiene un origen trágico, escribir de estos temas es el coraje el dolor la furia la tristeza que provoca la violencia en contra de las mujeres en nuestro país. “Cuando hablamos de rankings ocupamos uno de los primeros lugares y no precisamente podemos sentirnos orgullosos de esos. Los datos de feminicidios nos colocan en unos de los tops a nivel internacional. ¿En qué tipo de sociedad nos estamos convirtiendo?”, dijo.
Expresó que la novela no busca dar una solución o cambiar el mundo, pero es un medio por el que las palabras pueden sensibilizar, llegar al centro de las emociones y sentir empatía hacia esas mujeres, hacia esos niños que viven violencia intrafamiliar.