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Santos Laguna supo venir de atrás, aprovechando el apoyo de su afición en el Estadio TSM Corona, y se quedó con el boleto a las semifinales de la LIGA Bancomer MX. Los laguneros vencieron 2-0 a los Tigres de la UANL para empatar en el marcador global, haciendo valer el segundo criterio de desempate, la posición en la tabla general.
Pese al control de los laguneros, fueron los felinos quienes tuvieron la primera oportunidad. Era el minuto 7´; Juninho intentó de media distancia y la quiso acomodar en la horquilla izquierda, pero se fue apenas por arriba de la portería.
Aquel llamado de atención fue un pequeño chispazo de los Tigres, pues el cuadro de casa mantuvo su postura ofensiva. Al 16´, un tiro libre fue la llave para abrir el marcador; Osvaldo Martínez tomó la oportunidad y con el sello de la casa dejó inmóvil a Nahuel Guzmán. Era el 1-0 que alimentó la esperanza lagunera.
Santos creció en su volumen de juego. Jonathan Rodríguez tuvo la siguiente, cuando Julio Furch lo habilitó para dejarlo sin marca en zona de peligro, pero el uruguayo se la perdió al volar su disparo.
La jugada de táctica fija también fue un buen recurso de los Guerreros. Al 21´, Gerardo Alcoba ganó por alto en un tiro de esquina y cabeceó apenas por arriba del larguero.
El buen momento de los anfitriones fue opacado por un error del delantero Jonathan Rodríguez, quien pegó una patada con los tachones y se tuvo que ir a las regaderas a los 27 minutos.
El golpe causó estragos en Santos, que cedió la posesión del esférico contra unos Tigres que no dudaron en buscar el empate. Al 33´, Enner Valencia probó con un tiro libre que se estrelló en el metal izquierdo, generando la mejor opción de su equipo antes del descanso.
Tigres reanudó el complemento con el objetivo de neutralizar el ataque lagunero. Es así que al 51´ llamaron la atención con un buen centro de Jesús Dueñas a la posición de André Gignac, pero el francés se la perdió en el área chica al mandar su cabezazo por el costado izquierdo.
El error regiomontano costó demasiado caro; el delantero felino perdonó y sus anfitriones lo aprovecharon para vacunar a los 73 minutos. El goleador Djaniny Tavares apareció cuando más lo necesitaban; condujo el balón a la altura de la media luna y pegó un fogonazo rasante que se anidó por el rincón derecho. El portero Nahuel Guzmán alcanzó a tocar el esférico, pero fue insuficiente para alejar el peligro de su cabaña.
Tigres ya no pudo revertir la situación; tomaron el control en la recta final, pero sin ideas claras. Así terminó el compromiso en La Comarca; el empate global a dos goles le dio el pase a los de casa, que hicieron valer el segundo criterio de desempate, la posición en la tabla general.