💪 Levantó tres bolas de partido y firmó un comeback épico

Carlos Alcaraz, con apenas 22 años, acaba de escribir una de las páginas más intensas y emocionantes de la historia de Roland Garros. En un duelo maratónico de 5 horas y 29 minutos, el español logró vencer al número 1 del mundo, Jannik Sinner, por 4-6, 6-7(4), 6-4, 7-6(3) y 7-6(2), sumando así su quinto título de Grand Slam.
Y lo hizo como lo hacen los grandes: remontando, sufriendo, resistiendo.

Desde el arranque, la final tuvo sabor a drama. Sinner parecía tener el control: venía de no ceder ni un solo set en el torneo y rápidamente se colocó 2-0 arriba. Para colmo, en el quinto set tuvo tres bolas de partido. Pero Carlitos no se rindió. Lo suyo fue un recital de fortaleza mental, reflejos eléctricos y corazón a prueba de todo.

🧠 "Nunca había ganado tras perder los dos primeros sets. Y lo hizo contra el número uno del mundo". Así de grande fue la hazaña.

Con esta victoria, Alcaraz se convierte en el primer tenista nacido en el siglo XXI que conquista 20 títulos y en el tercero más joven en alcanzar cinco Grand Slams, solo por detrás de Bjorn Borg y Rafa Nadal. Casi nada.

La final, que terminó en un intenso súper tiebreak, fue tan brutal que ni los espectadores más ilustres –como Spike Lee o Dustin Hoffman– podían esconder la emoción. Hubo momentos para el recuerdo: la recuperación del 0-40, los cuatro juegos seguidos que forzaron el quinto set, o ese cierre con golpes que parecían coreografiados al ritmo de “Sweet Caroline”.

📌 Para Sinner, fue su primera derrota en una final de Grand Slam, y la quinta caída consecutiva ante un Alcaraz que, sin duda, le tiene tomada la medida.