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Visados, controles y eventuales exenciones marcarán la organización del torneo.
El Gobierno de Donald Trump no descarta redadas ni detenciones de migrantes durante el Mundial 2026, un escenario que refleja la tensión política que rodea la cita futbolística. Así lo confirmó Andrew Giulani, jefe del grupo de trabajo de la Casa Blanca, al detallar que el presidente “no descarta nada que haga más seguro a este país”.
Giulani habló en Washington, durante una conferencia previa al sorteo de grupos, previsto para este viernes 5 de diciembre, y remarcó que la administración actuará contra cualquier persona que altere el orden: “Lo que no toleraremos serán alborotadores que amenacen la seguridad”. Añadió que el evento demostrará que seguridad y hospitalidad “pueden ir de la mano”.
El Mundial, que se celebrará entre el 11 de junio y el 19 de julio de 2026 y también será organizado por Canadá y México, llega en medio de la preocupación que generan las políticas migratorias endurecidas del mandatario.
Consultado sobre posibles restricciones a visitantes, Giulani reiteró que cada decisión de visado implica un análisis de seguridad nacional. Recordó, además, que la Casa Blanca y la FIFA anunciaron que quienes tengan una entrada podrán obtener una cita con autoridades migratorias para gestionar un visado.
Giulani también destacó la reducción de tiempos de espera en consulados de países como Argentina, Ecuador o Brasil, situados por debajo de dos meses, así como la exención de visado para Europa y Japón. Sobre Haití e Irán, naciones con restricciones para viajar a EE.UU., señaló que parte de sus delegaciones obtuvo exenciones especiales.
En cuanto a los aficionados haitianos e iraníes, Giulani remitió la decisión final al Departamento de Estado, encargado de otorgar visados.
