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Puebla, Pue., 20 de agosto de 2025.- Los baches en la ciudad no solo generan molestias al transitar, también impactan la salud ambiental y reducen la vida útil de los vehículos, alertó la Dra. María Eugenia Ibarrarán Viniegra, investigadora del Instituto de Investigaciones en Medio Ambiente Xabier Gorostiaga, SJ (IIMA) de la IBERO Puebla.
De acuerdo con la especialista, las calles con asfalto deteriorado pueden disminuir hasta un 25% la durabilidad de los automóviles y aumentar un 34% las emisiones de gases de efecto invernadero. En caminos dañados, los vehículos ligeros generan hasta un 9% más de CO₂, mientras los pesados emiten un 6% adicional, lo que repercute directamente en la calidad del aire y la salud de los poblanos.
Se estima que en Puebla existen más de 200 mil baches, aproximadamente uno por cada nueve habitantes, lo que evidencia la urgencia de una estrategia integral de reparación vial. Los programas actuales, como el Bachetón estatal, resultan insuficientes por la falta de control de calidad en materiales y procedimientos, advirtió la académica.
“La solución no es solo bachear, sino levantar la carpeta deteriorada, planear con materiales de calidad y supervisión profesional”, señaló.
Además, los baches incrementan el consumo de combustible, generan polvo y partículas de hule por el desgaste de neumáticos, y provocan tránsito lento con maniobras constantes de frenado y aceleración, afectando directamente la experiencia de los conductores.
La Dra. Ibarrarán Viniegra hizo un llamado a diseñar un plan de largo plazo que contemple movilidad, salud y medio ambiente, subrayando que los baches son más que una molestia: representan un factor crítico de contaminación y malestar social.
