El presidente de Rusia, Vladimir Putin, designó este jueves a Alexander Darchiev como el nuevo embajador ruso en Estados Unidos, una decisión que genera expectativas en el escenario internacional. Darchiev, diplomático de carrera con una destacada trayectoria en el Ministerio de Asuntos Exteriores ruso, es conocido por sus fuertes críticas a Occidente y su firme defensa de las posturas del Kremlin.

Este nombramiento ha generado sorpresa en Ucrania y entre los aliados europeos de Washington, interpretándose como un posible intento de acercamiento diplomático en un contexto de crecientes tensiones geopolíticas. Las relaciones entre Rusia y EE.UU. se han visto afectadas en los últimos años por sanciones, conflictos diplomáticos y disputas sobre seguridad internacional.

Darchiev, quien previamente dirigió el Departamento de América del Norte en la Cancillería rusa, ha sido clave en la formulación de la política exterior de Moscú hacia Washington. Su llegada al cargo coincide con un momento crucial, en el que ambas naciones buscan redefinir sus relaciones bilaterales en temas como el control de armas, la guerra en Ucrania y las sanciones económicas impuestas por Occidente.

Aunque el Kremlin no ha dado detalles sobre las primeras acciones de Darchiev, su experiencia y postura firme indican una gestión orientada a defender los intereses rusos en la capital estadounidense.