🏌️‍♂️ El expresidente jugó al golf mientras crecía el rechazo ciudadano

🪧 Consignas feministas, palestinas y por derechos migratorios tomaron las calles

Cientos de manifestantes salieron este sábado a las calles de Edimburgo y Aberdeen para expresar su rechazo a la visita del expresidente Donald Trump a Escocia. Mientras el exmandatario jugaba al golf en su lujoso resort de Turnberry, al suroeste del país, miles de personas lanzaban consignas en contra de su presencia.

En Edimburgo, frente al consulado estadounidense, cerca del Gobierno escocés, se concentraron alrededor de 1,500 personas, según la organización Stop Trump. Este grupo incluye sindicatos, colectivos feministas, organizaciones climáticas y defensores de Palestina.

Los carteles exhibidos hablaban por sí solos: “Trump no es bienvenido”, “Haz que América piense otra vez” o “Donald Trump es un dictador”. También se vieron banderas palestinas y alusiones al caso Epstein, además de disfraces como el de “El cuento de la criada”, que satiriza visiones autoritarias sobre el género.

Aunque se ha mencionado que el viaje es personal, líderes como John Nevin señalaron que ese término “se estira hasta el absurdo”, pues Trump sostendrá reuniones oficiales. El domingo recibirá a Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, con quien discutirá un posible acuerdo arancelario.

Louise Brown, desde Newcastle, acusó al republicano de ser “un delincuente convicto que no respeta los derechos de las mujeres”, y cuestionó al primer ministro británico, Keir Starmer, por recibirlo pese a haberlo criticado cuando estaba en la oposición.

La venezolana Salomé Serrano, residente en Escocia, compartió que su familia no ha logrado regularizar su situación migratoria en EE. UU. porque “Trump creó un sistema inestable y arbitrario que castiga a los inmigrantes”.

En Aberdeen, la ciudad del noreste donde Trump inaugurará un nuevo campo de golf, la activista Nicola Seal criticó: “Trump es un amoral y un inmoral. No debería estar aquí”. También condenó el gasto público en su seguridad.

A pesar del ambiente tenso, Trump siguió su agenda. Este lunes se reunirá con Starmer y el martes abrirá el nuevo campo de golf junto a su hijo Eric Trump, posiblemente acompañado por John Swinney, primer ministro escocés. Swinney, defensor del evento Nexo Championship en el Trump International, ha sido señalado por usar recursos públicos para apoyar al expresidente, lo cual ha causado fricciones en la sociedad.