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La ley impondrá fuertes sanciones económicas a plataformas que incumplan los controles.
A partir del 10 de diciembre de 2025, los usuarios de Snapchat en Australia que se sospeche sean menores de 16 años deberán verificar su edad para conservar el acceso. La plataforma informó que enviará notificaciones directas y repetidas, un mecanismo diseñado para cumplir con la nueva legislación nacional.
El cambio no es menor. La regulación, descrita por autoridades como un marco pionero a nivel mundial, obliga a las redes sociales a “tomar pasos razonables” para impedir que menores de 16 años permanezcan activos en estos entornos digitales. La medida apunta a reducir riesgos, mejorar los filtros y elevar la responsabilidad de las plataformas.
La verificación podrá realizarse mediante cuenta bancaria, identificación oficial o un análisis de edad por selfie, herramientas que buscan precisión sin extender procesos innecesarios. Si un usuario no responde, su cuenta podrá ser bloqueada automáticamente.
El incumplimiento por parte de las empresas implicará sanciones de hasta 49.5 millones de dólares australianos, equivalentes a unos 33 millones de dólares estadounidenses, lo que refuerza el carácter obligatorio de la política. Con esta acción, Australia sostiene su apuesta por elevar los estándares de protección digital, mientras Snapchat ejecuta ajustes para alinearse con el requisito legal.
