• Cambios buscan frenar impacto a fabricantes, proveedores y consumidores
• Nueva orden ejecutiva aplicará incentivos a ensambladoras locales

El presidente de Ford, Jim Farley, declaró este miércoles que los recientes ajustes arancelarios impulsados por la Casa Blanca son un paso en la dirección correcta, aunque advirtió que el sector automotriz aún necesita más apoyo estructural.

Durante un evento celebrado en Kentucky, Farley sostuvo que “los cambios esta semana a los planes arancelarios ayudarán a reducir el impacto de los aranceles sobre los fabricantes, proveedores y consumidores”. Sin embargo, también enfatizó la necesidad de colaborar estrechamente con la administración federal para construir un marco integral de políticas que promuevan un mercado automotriz fuerte y en expansión.

El anuncio de Farley responde a la orden ejecutiva firmada por Donald Trump este martes, que modifica la proclamación del 26 de marzo de 2025, la cual imponía un arancel del 25% sobre ciertas partes automotrices importadas.

La nueva disposición establece que si dichas partes representan al menos el 15% del valor total de un vehículo ensamblado en EE.UU., el gobierno otorgará un crédito fiscal del 3.75% del valor total del automóvil. Esta medida aplicará entre el 3 de abril de 2025 y el 30 de abril de 2026, con el objetivo de incentivar la relocalización de la producción automotriz.

Trump aseguró que la iniciativa busca impulsar la manufactura nacional: “Queremos que las empresas vuelvan a fabricar en Estados Unidos, poco a poco, pero con paso firme”.